La Sierra de Ayllón desde la Sierra de la Cabrera, aprovechando la luz que se cuela horizontalmente por los escasos claros de una nubosa tarde, a modo de focos, lo cual es especialmente notorio en el caso de la Peña de la Cabra, con más detalle abajo.
Hacia el oeste, mirando al Mondalindo, el verdadero paisaje a estas horas es lo que normalmente se toma (injustamente) como mero adorno del telón de fondo: las nubes.
¡OHHH CIELOS, QUÉ CIELOS! Salidita por la Cabrera con recompensa eh?
ResponderEliminarSalud y mucha montaña.
LUis